PROBLEMAS DEL LACRIMAL

Las lágrimas son un líquido salino que baña la superficie del ojo para mantenerla húmeda. Contiene anticuerpos que protegen al ojo de las infecciones. Son producidas por las glándulas lagrimales y salen por dos pequeñas aberturas en los párpados denominadas conductos lagrimales.

Si las glándulas lagrimales no producen suficientes lágrimas, los ojos pueden secarse parcialmente y resultar dañados.

  • Obstrucción del conducto nasolagrimal

    La obstrucción del conducto nasolagrimal (dacriostenosis) puede deberse a varias causas como infecciones oculares recurrentes o crónicas, un desarrollo inadecuado del sistema nasolagrimal al nacer o incluso a fracturas de los huesos de la nariz o de la cara. La obstrucción puede ser parcial o completa.

  • Infección del saco lagrimal

    Habitualmente la infección del saco lagrimal (dacriocistitis) es debida a la obstrucción del conducto nasolagrimal. La infección hace que la zona que rodea el saco esté dolorida, roja o hinchada. El ojo suele enrojecerse y supura.

    El tratamiento se basa en la aplicación de antibióticos. En los casos de infecciones crónicas, el conducto nasolagrimal bloqueado puede abrirse con una sonda o mediante cirugía.

IRRITACIÓN E INFLAMACIÓN DE LOS PÁRPADOS

  • Edema de los párpados

    Cualquier objeto que irrite los ojos puede también irritar los párpados y producir tumefacción (edema del párpado). La causa más común es la alergia, que puede hacer que uno o ambos párpados se deformen y se hinchen.

    La eliminación de la causa de la tumefacción y la aplicación de compresas frías pueden aliviar la inflamación.

  • Inflamación de los párpados

    La inflamación de los párpados (blefaritis) provoca enrojecimiento, aumenta el grosor y suelen formarse escamas superficiales. Los procesos que pueden cursar con inflamación se deben a una infección causada por estafilococos en los párpados y en las glándulas grasas (sebáceas) que se localizan en los bordes de éstos, la dermatitis seborreica en la cara, el cuero cabelludo y la rosácea.

    La blefaritis tiende a ser recurrente y puede ser resistente al tratamiento. En muchos casos es molesta y poco estética.

ORZUELO

Un orzuelo es una infección de la glándula que se encuentran en el borde del párpado o por debajo de éste y suele estar provocada por un estafilococo. Se manifiesta primero con un enrojecimiento, sensibilidad y dolor en el borde externo del párpado. Luego, una zona se hincha. El ojo puede lagrimear, volverse muy sensible a la luz intensa y provocar la sensación de que hay algo en su interior.

Los antibióticos, pueden no dar los resultados esperados. En cualquier caso, siempre es recomendable aplicar compresas calientes durante 15 minutos varias veces al día. El calor ayuda a que el orzuelo madure, se rompa y termine drenando.

En algunas ocasiones el orzuelo se forma en una de las glándulas más profundas del párpado. Se denomina orzuelo interno y la molestia suele ser más intensa.

CALACIO (CHALACIÓN)

Un calacio (chalación) es el aumento de tamaño de una larga y delgada glándula sebácea del párpado como resultado de la obstrucción del orificio de abertura de la glándula que se encuentra en el borde del párpado.

Inicialmente, un calacio tiene el mismo aspecto que un orzuelo: párpado hinchado, dolor e irritación. Sin embargo, tras unos días los síntomas desaparecen, dejando un bulto redondeado e indoloro en el párpado.

La mayoría de los calacios desaparecen sin tratamiento al cabo del tiempo.

ENTROPIÓN Y ECTROPIÓN

El entropión es una dolencia en la que el párpado se pliega sobre sí mismo contra el globo ocular.

El ectropión es una dolencia en la que el párpado se pliega hacia fuera y no entra en contacto con el globo ocular.

Si el extremo de uno de los párpados se tuerce hacia dentro (entropión), las pestañas rozan el ojo, lo que puede provocar una ulceración y cicatrización de la córnea. Si el extremo de un párpado se tuerce hacia fuera (ectropión), ambos párpados son incapaces de cerrar correctamente y las lágrimas no se esparcen por el globo ocular.
Estos procesos son más frecuentes en las personas de edad avanzada. En ambas situaciones se pueden irritar los ojos, provocando lagrimeo y enrojecimiento. En último caso, ambos procesos pueden ser tratados con cirugía.

TUMORES DE LOS PÁRPADOS

En los párpados pueden aparecer formaciones benignas y cancerosas. Una de los tumores benignos es el xantelasma que es un bulto plano blanco-amarillento formado por grasa. Los xantelasmas no necesitan ser extirpados a menos que resulten molestos.

El carcinoma de células escamosas y el aún más frecuente llamado carcinoma de células basales, ambos tumores cancerosos, pueden también aparecer en el párpado.
Cuando aparece una formación sobre el párpado y no se resuelve tras varias semanas, se puede realizar una biopsia y evaluar el plan de acción.

CIRUGÍA ESTÉTICA DEL PÁRPADO

El objetivo de la Cirugía de los Párpados es rejuvenecer la zona de alrededor de los ojos, para mejorar su aspecto.

Los tratamientos más frecuentes son los que eliminan:

  • El exceso de piel de los párpados superiores y/o inferiores.

  • Las bolsas de los párpados superiores y/o inferiores, que rodean el globo ocular.

En ambos casos es importante el estudio preoperatorio para descartar contraindicaciones y evitar posibles complicaciones.

El exceso de piel de los párpados superiores suele ser tratado mediante la extirpación de la piel sobrante, con una pequeña incisión ubicada justo en el pliegue de los párpados, cuya cicatriz resulta inaparente.

Las bolsas de grasa que aparecen más frecuentemente en el párpado superior son las internas, que es posible extirpar a través de una pequeña incisión en la piel.

TRATAMIENTOS APLICABLES

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