El Día Mundial de la Uveítis se celebra cada 22 de octubre con el objetivo de concienciar a la población sobre esta enfermedad ocular, que puede afectar a personas de todas las edades.
La uveítis es una inflamación de la úvea, la capa media del ojo, que incluye el iris, el cuerpo ciliar y la coroides. Aunque no es muy conocida, puede causar complicaciones graves como pérdida de visión si no se trata adecuadamente.
Este día busca dar visibilidad a esta enfermedad ocular, por eso desde Vista Oftalmólogos, queremos promover en este artículo el conocimiento sobre sus síntomas, causas y tratamientos.
Síntomas de la uveítis:
Los síntomas de la uveítis varían según la parte del ojo afectada y la gravedad de la inflamación. Algunos de los más comunes son:
- Dolor ocular.
- Enrojecimiento del ojo.
- Sensibilidad a la luz (fotofobia).
- Visión borrosa o pérdida de visión.
- Manchas flotantes en el campo visual (miodesopsias).
- Lagrimeo excesivo.
- En algunos casos, puede haber pupilas con forma irregular.
Causas de la uveítis:
La uveítis puede tener múltiples orígenes. Entre las principales causas se encuentran:
- Trastornos autoinmunes.
- Infecciones.
- Lesiones o traumatismos oculares que provocan inflamación.
- Causas idiopáticas.
- Factores genéticos.
- Asociación con otras enfermedades oculares como el síndrome de Vogt-Koyanagi-Harada.
Tratamientos para la uveítis:
El tratamiento de la uveítis depende del tipo, la gravedad y la causa subyacente de la inflamación. El objetivo principal es reducir la inflamación, aliviar los síntomas y tratar la causa subyacente para prevenir daños permanentes.
Los tratamientos más comunes son:
- Corticosteroides en forma de gotas oculares, pastillas, inyecciones oculares o ungüentos.
- Fármacos inmunosupresores.
- Antibióticos o antivirales.
- Midriáticos (dilatadores de pupila).
- Biológicos.
- Cirugía. Puede ser necesaria en casos graves o crónicos, como la vitrectomía (remoción del humor vítreo) o para tratar complicaciones como el desprendimiento de retina o cataratas.
Para terminar, es importante recordar que un diagnóstico y tratamiento temprano son esenciales para prevenir complicaciones y preservar la visión. Ante cualquier síntoma ocular persistente, acude a nuestros oftalmólogos lo antes posible.