Cuidar tus ojos en cada etapa de la vida es fundamental para mantener una buena salud ocular a lo largo del tiempo. Desde Vista Oftalmólogos os dejamos algunas recomendaciones generales.

A lo largo de los años, no sólo debes tener en cuenta que el número de controles oftalmológicos que debes realizarte varían en función de tu edad, sino que también tendrás que prestar especial atención a algunos aspectos más específicos para cuidar tus ojos.

Infancia (de 0 a 5 años) y niñez (de 6 a 11 años):

  • Exámenes regulares: Los niños deben someterse a exámenes oculares periódicos para detectar problemas visuales y corregirlos a tiempo.
  • Juego al aire libre: Fomenta actividades al aire libre para reducir el riesgo de desarrollar miopía. La exposición a la luz natural es beneficiosa para el desarrollo ocular.
  • Tiempo de pantallas limitado: Establece límites de tiempo para el uso de dispositivos electrónicos. La regla 20-20-20 (cada 20 minutos, mirar algo a 20 pies de distancia durante al menos 20 segundos) puede ayudar a prevenir la fatiga visual.

Adolescencia (de 12 a 18 años) y adultez temprana (de 20 a 40 años):

  • Higiene visual: Descansa los ojos regularmente si trabajas mucho frente a pantallas. Parpadea con frecuencia para mantener los ojos hidratados.
  • Alimentación saludable: Incluye alimentos ricos en vitaminas A, C, y E, así como en minerales como zinc y selenio, que son beneficiosos para la salud ocular.

Adultez media y vejez (más de 40 años):

  • Exámenes regulares: Programa exámenes oculares periódicos para detectar enfermedades oculares relacionadas con la edad, como el glaucoma o la degeneración macular.
  • Control de enfermedades crónicas: Gestiona enfermedades como la diabetes y la hipertensión, ya que pueden afectar la salud ocular.

Toda la Vida:

  • Iluminación adecuada: Asegúrate de tener una buena iluminación mientras lees o realizas actividades que requieran concentración visual.
  • Protección UV: Usa gafas de sol con protección UV cuando estés al aire libre para proteger tus ojos de los daños causados por la radiación ultravioleta.
  • Hidratación: Bebe suficiente agua para mantener tus ojos y el resto de tu cuerpo bien hidratados.
  • No fumar: El tabaquismo está relacionado con un mayor riesgo de enfermedades oculares, como la degeneración macular.
  • Descanso adecuado: Asegúrate de dormir lo suficiente para permitir que tus ojos descansen y se recuperen.

Recuerda que estas son pautas generales y pueden variar según las condiciones específicas de cada individuo. Consulta con nuestros oftalmólogos para obtener consejos específicos según tus necesidades individuales.