La importancia que tienen nuestros ojos y el sentido de la vista es sobradamente conocido, pero ¿nos cuidamos lo necesario para tener una vista sana? Aquí te dejamos algunos consejos que deberías tener en cuenta:
1. Cuidar la alimentación. Mantener una alimentación sana y equilibrada, rica en vitaminas y minerales, como las frutas y las verduras, nos beneficia a la hora de evitar tensión arterial, azúcar o colesterol alto. La dieta es fundamental para preservar la salud ocular. Afecciones como las cataratas o la degeneración macular pueden acelerarse por no vigilar el sobrepeso.
2. Mantener los ojos hidratados. Beber agua frecuentemente también afecta positivamente a nuestros ojos, pero no solo así los hidratamos. También es recomendable parpadear de manera frecuente para evitar la sequedad e irritación ocular.
3. Llevar gafas de sol. El uso de las gafas solares es muy importante para mantener una vista sana. Siempre que estén homologadas y con el filtro apropiado, las gafas nos permitirán protegernos de los rayos ultravioleta que tan dañinos resultan para nuestros ojos. Además de esta función, las gafas sirven de parapeto, protegiendo nuestros ojos en días de mucho viento o lugares con polvo o humo.
4. Cuidar la higiene si usamos lentillas. En caso de utilizar lentillas, una buena higiene tanto de las lentes como del recipiente que las porta, es fundamental para evitar infecciones o problemas oculares, algunos de ellos, de gravedad.
5. Acudir al oftalmólogo regularmente. Siempre que tengamos alguna anomalía en los ojos, debemos acudir al especialista. Además, es recomendable visitarlo de manera frecuente a partir de los 40 años.
6. Descansar la vista cada 20 minutos. Si sometemos nuestros ojos a sobre esfuerzos delante de la pantalla del ordenador o del móvil, es aconsejable hacer una pausa cada cierto tiempo orientando nuestra mirada hacia otro punto para cambiar la distancia focal.
7. Dejar de fumar y no frecuentar lugares cargados de humos. El humo contiene partículas perjudiciales que favorecen la sequedad ocular y pueden fomentar la degeneración macular y la aparición de cataratas.